habrá que tengo un techo con goteras, y lo tengo que arreglar...

A veces simplemente quisiera desaparecer, para no estar. Irme lejos de todo, TODO, tanto de lo bueno como lo malo, y de lo molesto especialmente. Sólo levantarme e irme para despejarme un poco en soledad. No pido nada más. Que sensación horrible, querer irte corriendo de tu propia casa. Pero lo pensás dos veces y te das cuenta de que no, no es así. Hay que bancarsela, no irse. Por más inútil que estés ahí metido, por más que no hagas más nada que estar sentado y mirar como los demás "levantan el volumen de su voz" (gritan). En momentos de paz no se molesta a nadie, y menos si después llevas a la persona a ver algo que trató de no ver. Pero nadie me entiende, que depresión. No sé, no me pintan las ganas de estar bien. Pero mi entorno se refleja lo que en mi cabeza está. Irónico. Entonces, a nadie le pinta estar bien o tratarme bien (ES UN IDA Y VUELTA, SIEMPRE). Pero son mas las ansias de aguantar las que tengo, que de cambiar, o sólo por ahora.
¿Y qué quiero?
Llorar, eso me gustaría. Lastima, que ni para eso tenga ganas...
O un abrazo... pero acá, donde me tengo que bancar estar, no hay nadie que en estos momentos esté para ese trabajo.
DESAPARECER ES LO QUE QUIERO.
Gritarle al mundo, a un abismo, todo lo que siento. Poder tirarme desde lo más alto y caer, caer, caer, darme cuenta que es un sueño y nunca nunca despertar. Saltar y correr, por ese "ningún lugar", soltarme, ser libre, libre de todo. Que el todo sea el nada y el nada sea el todo. Que no se viva el tiempo. Que sólo simplemente pueda gritar. Expandirte en mente, explotar. Sería genial. Con un inmenso cielo en tu porvenir, nada más.
Tal vez si hiciera al menos una cosa bien en mi vida, me compensaría un poco. Pero soy así, ésto soy. Realmente, sigo sin tener ganas de nada.

... y sigo pensando que el abrazo no me vendría mal :(